El Regimiento Escuela Policía Militar Nº 3 Esteban Arze de Cotapachi, en Quillacollo, abrió el museo Esteban Arze en el que se plasma mediante fotografías y pinturas la historia del Ejército boliviano en cuatro áreas. En la primera sección se recuerda el inicio de las revoluciones en el país, la segunda destaca las principales guerras y batallas del Ejército. En la tercera se exponen las funciones que tienen los regimientos militares y la cuerta finaliza con un vistazo al trabajo que realiza esta unidad especializada.
En menos de 30 minutos, el visitante se transporta al pasado y revive la historia de los héroes del país. El museo está ubicado a la altura del kilómetro 10 de la avenida Blanco Galindo del municipio de Quillacollo y las delegaciones que deseen visitar el lugar deben mandar una solicitud para coordinar los horarios.
¿Qué podrán ver en el museo? El teniente de infantería, Mario Salazar, dijo que en la primera sección se dispuso fotografías de personas de las 36 etnias de Bolivia y algunas vestimentas. También se puede apreciar cerámicas y tejidos de la cultura aimara y quechua. Dentro la misma habitación que aún conserva su estilo colonial, el guía continúa el recorrido contando la historia de “los primeros vientos de la revolución”. Menciona a Pedro Domingo Murillo, Jaime Zudañez y Pedro Ignacio Muiba, líder indígena de la revolución mojeña.
En la esquina sud del cuarto, sobresalen las fotografías de los héroes indígenas nacionales como Túpac Katari, Pedro Zárate Villca, Bartolina Sisa y Alejo Calatayud. La primera área del museo culmina con la historia de las guerrillas protagonizadas por los esposos Padilla y el Moto Méndez.
El sector más amplio está destinado a la exposición de las batallas de Ayacucho, Junín, Tumusla y Aroma. La última estuvo al mando del general Esteban Arze que organizó su Ejército en las tres armas básicas militares: la infantería, caballería y artillería.
El accionar del general Arze en la batalla del 14 de noviembre de 1810 dio nacimiento al Ejército boliviano. En esta área se exhiben los palos, hachas y lanzas que utilizaron los campesinos como armas de combate.
“El recorrido va por años y fases”, resaltó Salazar, después de hacer una breve síntesis de la presencia del Ejército en la Guerra del Pacífico. Además, en un cuarto se emula el territorio donde se protagonizó la Guerra del Chaco. Las anécdotas del coronel Manuel Marzana, mariscal Bernardino Bilbao Rioja y el legendario capitán Víctor “Charata” Ustáriz, los tres héroes más sobresalientes de este episodio, son destacados por el guía mientras explica la defensa de Boquerón a través de una maqueta.
En la tercera sección exhiben fotografías de las actividades que ahora realiza el Ejército y de sus regimientos emblemáticos. Además, hay un espacio que hace una alegoría a la habitación del general Arze, donde está su cama que fue traída desde Tarata. “Somos los encargados de la disciplina, ley y orden dentro las Fuerzas Armadas, es la esencia de la Policía Militar”, manifestó Mario Morales.
ORIGEN DEL “FUERTE COTAPACHI”
El subcomandante del Regimiento de la Policía Militar Esteban Arze de Cotapachi, Ademar Acebey, informó que el “Fuerte de Cotapachi” fue la finca del general Esteban Arze y tras ser comprado por Simón I. Patiño, durante la Guerra del Chaco, fue donado al Ejército boliviano. A partir de 1935 funcionó como criadero de ganado vacuno y porcino. En los años 70 fue un depósito de armamento.
En 1972 en el fuerte se desarrolló el primer curso de la Policía Militar de Bolivia en el que participaron instructores capacitados en el exterior. Ese entonces no se contaba con las instalaciones con las que cuenta ahora, todo era tierra. Por eso cuando terminó la instrucción el personal volvió a la ciudad y en el lugar se empezó a sembrar, explicó Acebey. Recién en 1975 se crea y funda la unidad como Policía Militar. Tras tomarse los predios de Cotapachi, se hicieron arreglos de la fachada y se construyeron dormitorios. Esos trabajos dieron inicio a lo que ahora es el “Fuerte de Cotapachi”.
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